Los problemas para respirar están muy relacionados con el dolor de pecho. Si sientes una punzada en el pecho al respirar, esto se debe a la falta de aire. Es conveniente que en este caso acudas al médico ya que puedes tener entre otras cosas una pulmonía o una embolia pulmonar.
Cuando el dolor se expande por la espalda, malo, es posible, incluso, que te tengan que operar de urgencia, más aún si tienes la presión alta, ya que este dolor es consecuencia del rompimiento de la pared de una vena aorta. Para ello, controla tu presión.
Si lo que sientes son punzadas en el pecho, es muy posible que el origen del dolor sea muscular. En estos casos, es posible que si cambias de posición o respiras hondo, te duela más. La solución: anti-inflamatorios y relajantes musculares.Si el dolor es general y se te alivia cuando te inclinas hacia adelante, lo que te pasa es que se te ha inflamado la capa que cubre el corazón, también llamado pericarditis. Al mismo tiempo, puedes tener fiebre, congestión nasal o dolores por el resto del cuerpo, pero con medicamentos estos dolores desaparecen rápidamente.
Cuando el dolor de pecho es una presión fuerte en el medio o en lado izquierdo, es cuando hay que preocuparse de verdad, ya que se asocia a un problema cardíaco. Puede ser debido a una angina o a un infarto. Es el más peligroso. Con frecuencia, además, se dan síntomas como vómitos, naúseas y sudores. Tómate una aspirina de 325 mg y llama rápidamente a urgencias (al 112 creo que es).
El dolor más común es un dolor que es como una especie de ardor o quemazón, que sube desde el estómago. Es consecuencia de la acidez de la comida que suele aparecer al poco rato de comer. Es conocido como reflujo gastrointestinal.
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